El Braille se ha convertido en el principal medio de los invidentes para leer textos. Un sistema eficaz, que cumple su cometido, pero que tiene el problema de estar muy ligado al mundo analógico, a pesar de haber soluciones muy creativas. Hay un proyecto para hacer pantallas que cambian su volumen para representar el relieve de cada letra pero de momento anda muy verde. El MIT propone otra aproximación a esta brecha digital.
Con la forma de un anillo tenemos FingerReader, un dispositivo que reconoce el texto que tiene delante suya y lo va “leyendo” a través de un sistema de sonido. Como un audiolibro pero en tiempo real y con la ventaja de que funciona con casi todo tipo de textos, en papel o en digital.
Leyendo al dedillo
Para hacerlo funcionar es tan sencillo como ir pasando el dedo por el texto y el anillo se encargará de ir registrando y procesando el texto para posteriormente reproducirlo a través de un sistema de voz sintética. Si nos pasamos de línea el anillo vibrará para avisarnos de ello.
Tras tres años de desarrollo, ya se han realizado las primeras pruebas con éxito y aunque todavía hay que pulirlo para lograr comercializarlo el proyecto va por buen camino y es una solución muy polivalente para la gente con problemas de visión. A lo largo de un día pasan delante de muchos textos en diferentes soportes y formatos que no cuentan con un equivalente Braille.
En el mercado ya hay tecnología capaz de leer textos en tiempo real. De hecho seguro que más de uno se acuerda de esos escáneres de texto que venden en algunas tiendas de material de oficina para transcribir apuntes a formato digital. La diferencia es que este sistema, además de ser más pequeño, cuenta con reproducción por voz en tiempo real.
Aunque promete ser una herramienta muy útil para los invidentes, sus creadores frenan el entusiasmo y son realistas al reconocer que si bien puede ser útil no pretenden que sea un sustituto del Braille sino más bien un complemento. Además en las pantallas táctiles todavía no funciona bien por la respuesta de éstas cuando ponemos el dedo sobre ellas.
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