En el día de hoy hemos conocido la noticia, gracias al medio The Verge, de que la compañía americana Microsoft ha planteado una significativa reducción en los puestos de empleo, centrado sobre todo en la parte adquirida de Nokia, movimiento que ya analizamos hace unos meses.
Como muchas y muchos sabréis, Nokia nos mostraba este mismo año en el Mobile World Congress de Barcelona una gama de dispositivos Nokia cuyo sistema operativo era una versión modificada de Android. Su principal baza, sin duda, sería el precio, que en ninguno de los modelos pretendía superar los 120 euros. Sin embargo, en las últimas declaraciones de la compañia, parece subrayarse un aspecto claro: los dispositivo Nokia con Android dejarán de tener su lugar en el mercado.
“Además del portfolio de productos ya planeado, pensamos desarrollar más dispositivos Lumia low-cost cambiando algunos diseños de Nokia X y producirlos como dispositivos Windows Phone. Esperamos hacer este cambio inmediatamente mientras continuamos vendiendo y dando soporte a los productos Nokia X existentes”.
Con este movimiento, Microsoft parece poner fin a su pretensión de introducirse de forma consolidada en el mercado Android con dispositivos corriendo este sistema operativo para centrarse de lleno en su gama de productos Lumia con Windows Phone. Si bien el éxito o fracaso de ventas de esta gama de dispositivos ha podido influir de lleno en la toma de esta decisión, parece claro que algunos responsables de la compañía podrían no haber estado del todo convencidos de esta gama de terminales que hacen uso de un sistema operativo diferente al suyo propio.
Una decisión que si bien puede cogernos desprevenidos, puede ser más que entendible si atendemos a la adquisición de Nokia por parte de Microsoft de forma prácticamente absoluta y la necesidad de esta compañía de reforzar y afianzar un sistema operativo que sigue aún muy lejos de las cifras de Android o iOS en cuando a su adopción.
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